Con casi el 70% de los hogares australianos conectados a una red de gas natural o a una alternativa de gas embotellado, el paso al hidrógeno limpio y renovable es un paso importante para reducir las emisiones de carbono.
El hidrógeno, cuando se utiliza como combustible, no produce emisiones de carbono y puede mezclarse con el gas natural que se suministra a los hogares de toda Australia, o incluso sustituirlo. Pero el hidrógeno también puede utilizarse para sustituir a los combustibles fósiles en muchos procesos industriales, como la fabricación de plástico y acero, los combustibles líquidos e incluso la producción de alimentos. Por eso se le ha apodado "la navaja suiza de los combustibles".
Muchos expertos y líderes del sector, entre ellos Bill Gates, de Microsoft, abogan por una adopción más rápida del hidrógeno.
"Cuanto más rápido abaratemos y hagamos más accesibles los combustibles de hidrógeno, antes podrán sustituir a los combustibles fósiles y más probabilidades tendremos de evitar una catástrofe climática".
Bill Gates
Para más información sobre las ventajas y la ciencia que subyacen al uso del hidrógeno, consulte esta reciente entrada del blog de Bill Gates.